El hombre en busca de sentido
Resumen/Sinopsis:
El doctor Frankl, psiquiatra y escritor, suele preguntar a sus pacientes aquejados de múltiples padecimientos: «¿Por qué no se suicida usted? Y muchas veces, de las respuestas extrae una orientación para la psicoterapia a aplicar: a éste, lo que le ata a la vida son los hijos; al otro, un talento, una habilidad sin explotar; a un tercero, quizás, sólo unos cuantos recuerdos que merece la pena rescatar del olvido. Tejer estas tenues hebras de vidas rotas en una urdimbre firme, coherente, significativa y responsable es el objeto con que se enfrenta la logoterapia.
En esta obra, Viktor E. Frankl explica la experiencia que le llevó al descubrimiento de la logoterapia. Prisionero, durante mucho tiempo, en los desalmados campos de concentración, él mismo sintió en su propio ser lo que significaba una existencia desnuda. ¿Cómo pudo él que todo lo había perdido, que había visto destruir todo lo que valía la pena, que padeció hambre, frío, brutalidades sin fin, que tantas veces estuvo a punto del exterminio, cómo pudo aceptar que la vida fuera digna de vivirla? El psiquiatra que personalmente ha tenido que enfrentarse a tales rigores merece que se le escuche, pues nadie como él para juzgar nuestra condición humana sabia y compasivamente. Las palabras del doctor Frankl alcanzan un temple sorprendentemente esperanzador sobre la capacidad humana de trascender sus dificultades y descubrir la verdad conveniente y orientadora. (fuente: quelibroleo.com)
Valoración:
Una mañana, vi a un compañero —un hombre valiente y digno—llorar desconsolado como un niño porque, al haberse encogido sus zapatos por la humedad, no le entraban en los pies y tendría que andar descalzo por la nieve. En esos fatídicos minutos yo encontraba un exiguo consuelo mordisqueando, con inmenso deleite, el trocito de pan guardado el día anterior en el bolsillo del abrigo.
Es imposible no conmoverse hasta lo más profundo con el sobrecogedor relato del prisionero 119.104, que es como anónimamente quería firmar su obra este reconocido psiquiatra.
Se podría calificar esta obra de muchas maneras, cualquier adjetivo se queda corto a la hora de valorarla. Demoledora, impactante, sobrecogedora, aterradora… No llegaría a transmitir con ninguno de ellos lo que realmente es este libro.
Sobre la vida en los campos de concentración nazis (lagers) se ha escrito largo y tendido. Este libro no se extiende sobre los horrores que allí se cometían. Al contrario, nos descubre las claves para resistir y sobrevivir ante situaciones absolutamente abominables.
¿Cómo se sobrevive a un campo de concentración?
¿Cómo se vuelve a la vida normal tras una experiencia tan aberrante y dolorosa?
El autor, que ejerció de médico en los distintos lagers por donde le tocó peregrinar, nos desvela sus recursos y lo que le ayudó a salir vivo de aquel traumático encierro, y sobre todo cómo logró encontrarle sentido a la vida, tras haberlo perdido todo.
Este libro me llegó por recomendación de una muy querida amiga, y cuando leí el resumen, recuerdo que le dije que no estaba con ánimos de leer algo tan duro: Me contestó que este libro precisamente es el mejor antídoto para las penas y las tristezas. Y así es, deberíamos tenerlo todos cerca, para leerlo y releerlo cuando sentimos que las cosas no van bien. Me atrevería a decir que ejerce incluso mejor que cualquier antidepresivo.
Dividido en dos partes, la primera y más extensa nos introduce en los lagers de la mano del autor en modo de narración. Nos describe cómo le trataron a él y a sus compañeros, como esclavos, obligados a trabajar en condiciones infrahumanas, a temperaturas bajo cero, sin ropa ni calzado adecuado, sin apenas alimentos. El autor no se extiende en los horrores, él mismo dice que aquello ya se ha escrito y descrito de forma muy extensa. Él tenía claro que quería salir vivo de allí, y sabía que necesitaba educar su mente a diario para no dejarse quebrar por el desánimo.
Inventó pequeños trucos para alejarse, al menos con la mente, del cruel día a día. Uno de esos trucos consistía en guardarse un pequeño trozo de la mísera ración de pan para mordisquearlo cuando sentía que la desazón podía con él.
Llegó a la conclusión de que no importan tanto las cosas que te ocurren, por tremendas que puedan ser, sino más bien cómo te afectan y cómo lo gestionas.
Tener esperanza, saber que fuera esperaba alguien, tener una meta en mente, todo aquello era lo que daba sentido a las vidas de aquellos hombres. La diferencia la marcaba el desaliento. Aquellos que se rendían, que caían en la apatía y se dejaban arrastrar por el desánimo, eran los que morían automáticamente. El autor establece una conexión inequívoca entre el funcionamiento del sistema inmunológico y la rendición.
El hombre en busca de sentido abre las puertas a la esperanza. A pesar de describir lo mejor y lo peor de cada ser humano, ya que nos narra cómo entre los propios prisioneros había auténticos “cerdos” capaces de una crueldad infinita, pero también guardias que se comportaron de manera humana hacia los cautivos, insiste en que la vida nunca, nunca deja de tener sentido.
“…al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: la libertad humana —la libre elección de la acción personal ante las circunstancias—para elegir su propio camino”.
“…es en su actitud frente al dolor donde reside la posibilidad de conseguir un logro excepcional”.
Frankl, que ejercía como psiquiatra en Viena, ya había empezado a desarrollar su método psicoterapéutico, la logoterapia, antes de ser detenido y encerrado.
En los campos de concentración tuvo ocasión de desarrollar su teoría y su terapia psicológica a partir de sus experiencias como prisionero.
La logoterapia ocupa la segunda parte del libro, en la que nos explica qué es, cómo se enmarca en el análisis existencial, un tipo de terapia con un marcado carácter filosófico centrado en la búsqueda de significado vital ante el vacío existencial, causante de síntomas psicológicos, emocionales y físicos.
Esta obra que es una auténtica joya, es también un manual de supervivencia emocional. Aquí la palabra resiliencia cobra todo su sentido.
Un libro de esperanza, que nos enseña el incalculable poder del hombre para desafiar y luchar contra las peores circunstancias que quepa imaginar.
Toda una lección de vida.
Detalles
Autor: Viktor Frankl
Editorial: Herder
Número de páginas: 162